viernes, 20 de abril de 2012

Evan Roberts, el carbonero de Dios



En muy raras ocasiones se encuentra piedras preciosas en las minas de carbón, Evan Roberts fue una de ellas, pero el tiempo y las circunstancias terminaron por convertirle en un carbón más entre la multitud que le rodeaba.
Roberts nació en una familia de práctica metodista el 8 de junio de 1878. Su padre, un rudo y religioso minero, sufrió un accidente siendo Robert muy joven y este tuvo que dejar sus estudios y dedicarse al duro oficio de minero. El joven minero era un habido lector la Biblia y tras el trabajo recorría el kilómetro y medio que le separaba de la capilla de su localidad.

En 1898, Evan tuvo que emigrar a Mountain Ash, una ciudad próxima a la suya, para buscar trabajo. Al poco tiempo, el pastor de su iglesia le pidió que le ayudara en la iglesia y no tardó mucho en ser recomendado para dedicarse a pleno tiempo en el ministerio.

Roberts no se sentía satisfecho con su relación con Dios. Algo desanimado acudió a escuchar a un evangelista itinerante llamado Seth Joshua. El reverendo Joshua llevaba varios años orando para que Dios levantara a un nuevo Eliseo, un hombre sencillo que trajera el avivamiento a la región. Tras asistir a varias reuniones experimentó un encuentro con Dios y su vida cambió por completo.

En 1904 tuvo su primera visión sobre el avivamiento en Gales. Vio un brazo que se extendía desde la luna hasta Gales. Él creyó ver la mano de Dios en esta visión y comenzó a organizar reuniones en su iglesia. En pocos meses su fama se extendió por todos Gales y centenares de personas acudían a sus reuniones.

La prensa se enteró del fenómeno y envió a corresponsales para que contaran lo que pasaba en la pequeña iglesia galesa. Muchos mineros dejaron su ruda vida y comenzaron a asistir a los cultos. Las mujeres de los mineros también asistieron masivamente y, a diferencia de otras congregaciones, se permitió que participaran activamente en los cultos. El nivel de vida de los mineros cambió radicalmente. Muchos dejaron el alcohol y comenzaron a tratar mejor a sus hijos y mujeres.

El 29 de enero de 1951 moría a la edad de sesenta y dos años. Su liderazgo había sido efímero pero durante décadas Gales experimentó un gran avivamiento que conmovió a toda la nación.

Dios quiere darle vida a Su Pueblo


Por Rev. Gustavo Martínez
“Restáuranos, oh Dios de nuestra salvación, y haz cesar tu ira sobre nosotros ¿Estarás enojado contra nosotros para siempre? ¿Extenderás tu ira de generación en generación? ¿No volverás a darnos vida, para que tu pueblo se regocije en ti?” Salmo 85:4-6.
Generalmente los hombres impíos aman más las tinieblas que la luz y no vienen a la luz para que sus obras no sean reprendidas; muchos prefieren creer a la mentira más que a la verdad (Juan 3:19-21). Lamentablemente esa misma situación estaba imperando en el pueblo de Israel.

El profeta Jeremías y otros profetas hablaron verdad al pueblo, pero ellos no quisieron creer. Hasta el profeta llegó a pensar que le era una afrenta hablar de parte de Dios. Sin embargo, los falsos profetas le hacían ofrecimiento, al pueblo, y les resultaba más fácil creer que las naciones vecinas estaban para ayudarlos y ampararlos. Le era más fácil creer tal cosa que la Palabra de Dios. El profeta Jeremías, les amonestaba que si no se apartaban de su mal camino vendría el juicio y precisamente de parte de las naciones vecinas.

Ese juicio llegó, vino el cautiverio, Nabucodonosor sitió la ciudad y el templo. La mayoría de ellos fueron cautivos, otros murieron y quedó un remanente muy pequeño. Después de un juicio tan desbastador como el que les sobrevino y el tiempo que llevaban cautivos era de esperarse que sus esperanzas humanas fallecieran, no había manera de salir de Babilonia y regresar de nuevo a su tierra.

Cuántas veces quizás oraron a Dios y pidieron su ayuda para salir de aquel cautiverio, pero era como si Dios no les escuchara porque no había respuesta alguna. Lo que había en sus mentes y corazones era que seguirían cautivos y que nunca más volverían a disfrutar de la libertad que un día tuvieron.

Recuerde que Jerusalén fue llamada “la señora de provincias”, “la grande entre las naciones”, era una ciudad de gloria, pero se descuidaron y ahora vinieron a ser siervos, esclavos, de manera que fueron tratados de una forma severa, terrible e inhumana (Lamentaciones 1:1). Por ello sus esperanzas habían muerto. En el Salmo 85 el pueblo oraba: “Restáuranos, oh Dios de nuestra salvación, y haz cesar tu ira sobre nosotros” (v.4). Realmente se sentían muertos, destruidos, arruinados y sin esperanzas. Y en su oración ellos se preguntaban: “¿Estarás enojado contra nosotros para siempre? ¿Extenderás tu ira de generación en generación? ¿No volverás a darnos vida, para que tu pueblo se regocije en ti?” (vv.5, 6).

El pueblo reconoce que la única manera que el hombre puede estar gozoso es a través de la experiencia, del encuentro, del toque de parte de Dios. Cuando Dios toca a una persona, no importa en las condiciones que se encuentre, Dios lo cambia. La Sagradas Escrituras nos hablan de aquella mujer que vivía en Naín, ella venía llorando, con dolor en su corazón, porque llevaba a enterrar a su hijo; pero Cristo acercándose, tocó el féretro y, le ordenó al muchacho que se levantara y entonces el joven se incorporó, pasó de la muerte a la vida (Lucas 7:11-17). Cuando Cristo toca imparte vida porque Él es el único que puede sacarnos de la muerte a la vida.

Y aquellos Israelitas decían: “¿No volverás a darnos vida, para que tu pueblo se regocije en ti?” (Salmo 85:6). La única manera de tener gozo es con la presencia de Dios, con su comunión. Cuando el hombre pierde la comunión con Dios pierde la paz, entonces entra en una depresión. Cuando trata de salir y solucionar los problemas de su espíritu y su alma con sus propias fuerzas, a través del licor, la droga y otros vicios, se destruye. Pero cuando el Señor toca, las cosas cambian, no importe que esté muerto Dios le da la vida, porque Él es la vida. Con un toque del Señor se rompen las cadenas, la muerte, el vicio, el pecado y todo aquello que el mundo ofrece quedan deshechos por Su mano poderosa; con el toque del Señor los corazones quedan libres.

“La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos… y por cierto secos en gran manera. Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes. Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy Jehová. Profeticé, pues… y he aquí tendones sobre ellos, y la carne subió, y la piel cubrió por encima de ellos; pero no había en ellos espíritu.

Y me dijo: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Así ha dicho Jehová el Señor: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán. Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército grande en extremo. Me dijo luego: Hijo de hombre, todos estos huesos son la casa de Israel. He aquí, ellos dicen: Nuestros huesos se secaron, y pereció nuestra esperanza, y somos del todo destruidos. Por tanto, profetiza, y diles: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo abro vuestros sepulcros, pueblo mío, y os haré subir de vuestras sepulturas, y os traeré a la tierra de Israel...” Ezequiel 37:1-14

El capítulo 37 de Ezequiel se refiere al restablecimiento físico y espiritualidad de Judá. Nos proporciona una buena ilustración de lo que será el avivamiento que tendrá lugar en la Iglesia del Señor. ¿No se ha preguntado usted por qué Dios no llevó al profeta a un templo, o a un jardín, o a otro lugar diferente? Se lo llevó a un cementerio para darle un mensaje, a un lugar solitario, desierto, donde solo yacían huesos humanos esparcidos por todo el valle. El profeta cuando vio aquel panorama quizás deseó regresar inmediatamente, pero estaba de la mano del Señor porque el Espíritu de Dios lo había llevado para darle un mensaje, para que entendiera plenamente la condición del pueblo. Tal vez veía al pueblo en cautiverio, pero lo veía con vida. Jamás se pudo imaginar hasta dónde ese pueblo había descendido, espiritualmente, estaba muerto.

La Biblia dice que lo llevó a “un valle que estaba lleno de huesos secos… y por cierto secos en gran manera.” (vv.1, 2). Porque si lo lleva a un lugar donde hay cuerpos acabados de morir, relativamente frescos y que no han llegado al estado de descomposición se podía albergar un poco de esperanza en cuanto a vida se refiere.

Cuando Ezequiel es llevado al valle de huesos secos ya habían pasado tantos años que los esqueletos estaban apartados y todos los huesos regados. Y luego le pregunta Dios: “Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos?” (v.3a) El profeta no pudo decir otra cosa que: “Señor Jehová, tú lo sabes” (v.3b). En estas palabras se está exaltando la soberanía de Dios. El profeta reconoce que Dios lo sabe todo, y que en Él está la potestad, si desea dar vida. Entonces vino respuesta de parte de Dios: “Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová” (v.4).

Dios nos ha llevado a experiencias profundas y espirituales a través de la Palabra y nos deja ver el panorama de muerte por todas partes y le dice a la Iglesia: “¿Vivirán estos huesos?” Nosotros como pueblo de Dios que hemos creído en Su soberanía podemos decir: ¡Sí vivirán! Por lo tanto, nuestra responsabilidad es llevar el mensaje de vida, que cambia, transforma, liberta y rompe las cadenas a un mundo que se pierde.

Dios lleva al profeta a esta experiencia para que su mensaje sea más convincente. Cuando el comenzó a profetizar vio aquellos huesos unirse cada hueso con su hueso. Luego comenzaron a subir los tendones, la carne y piel los cubrió, ya no eran esqueletos sino cadáveres sobre la arena del desierto. Y luego profetizó al espíritu y entró espíritu de vida en ellos y se levantaron, se pusieron en orden como un ejército. Note que dice que profetizó como le fue ordenado y no como le parecía, o creía. El mensaje no es conforme a los que creemos, pensamos, no a la imaginación; sino que hay que profetizar conforme al mensaje auténtico, genuino, verdadero, bíblico, con celo, unción y revelación.

La verdadera Palabra es capaz de restaurar las vidas, rompe cadenas, produce cambios, es la Palabra la que hace que el pecador vuelva a la vida. Es el Espíritu de Dios el que entra a lo profundo de cada corazón y a la conciencia y lo levanta no importa hasta donde haya descendido y cual sea su condición.

Cuando el espíritu entró en esos huesos secos no se quedaron medios vivos, ni medios muertos. No, se levantaron vivos completamente, y estuvieron sobre sus pies como un ejército en marcha. Hay quienes siendo fornicarios, ladrones, adúlteros, mentirosos y pecadores se atreven a decir que el Espíritu Santo ha venido a sus vidas y les ha bautizado. Cabe aclarar que cuando el Espíritu Santo de Dios viene lo primero que hace es cambiar, transformar, saca la muerte, lo que queda es vida, por lo tanto usted tiene que ser diferente porque se cumple la Palabra del Señor que dice: “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí son todas hechas nuevas” (2 Corintios 5:17).

Por eso debemos preocuparnos por la vida, por la unción del Espíritu Santo porque allí está la diferencia. El cristiano lleno del Espíritu Santo es diferente, se consagra, adora, levanta sus manos, ríos de agua vivía corren por su interior.

El pueblo estaba en cautiverio y este mensaje del profeta era la esperanza, no todo está perdido en medio de la ira hay misericordia. Dios quería llevarles a su tierra, hacerlos una nación soberana. No permanecían cautivos en Babilonia porque allí las cadenas se iban a romper, y reedificarían las ruinas, la ciudad, el templo y la gloria de aquella casa sería mayor que la primera.

Algunos historiadores señalan que la vida de los judíos allí en Babilonia era un cuadro muy triste. Estaban junto a los ríos de Babilonia y allí lloraban, una de las cosas que más torturó sus mentes y sus corazones eran los recuerdos de la gloria de Dios en Jerusalén. Dios utilizó el recuerdo para que el pueblo volviera a desear aquellos días de gloria. Ellos lloraban y hasta colgaron sus instrumentos de música, estaban inactivos espiritualmente, pero había razones para sentirse tristes y sin gozo, no podían cantar, ni tocar los instrumentos; la razón principal era que estaban en tierra de extraños, era tierra de cautiverio. Faraón pretendía que el pueblo de Israel ofreciera sacrificios a Jehová en Egipto por eso cuando Moisés le pidió que dejara ir al pueblo al desierto, él contestó, ¿por qué ir tan lejos si aquí en Egipto se puede hacer los sacrificios?

A Satanás le incomoda que usted sea santo, que renuncie al pecado, que rompa con las amistades y con aquellas cosas que le roban la comunión con Dios. Lo que no quiere el diablo es que usted tenga vida. Desde luego que los que están muertos no son blancos de ataque de Satanás, esos no son de su interés. Lo que le choca a Satanás y le da dolor es la santidad; cuando encuentra hombres y mujeres santos que no se doblegan ante sus exigencias, que se mantienen fieles y firmes; que pueden decir “preferimos morir antes que ceder”.

Los babilonios decían: “Canten algunos cánticos de Sion”. El pueblo de Dios respondía: “no podemos cantar”. ¿Por qué no?  Si allí estaban las arpas y todo lo que necesitan. No podían porque faltaba lo principal, y esa era la libertad, y si no hay libertad no se puede cantar. Por eso usted en ocasiones viene al culto y aunque todo el pueblo se goza usted está como espectador, mirando de un lado a otro y hasta ha tratado de levantar las manos para adorar, pero no puede porque hay una cautividad en su corazón, no tiene la libertad para alabar a Dios. Pero la Palabra desea darle vida, levantarlo y romper sus cadenas. Dios quiere un pueblo libre, Él desea darle vida, y que experimente la gloria de su poder.

Se necesita la libertad para poder alabar, y glorificar el nombre de Dios. ¿Por qué muchos no se sienten libres? Porque fueron llevados cautivos por su pecado, por su orgullo, su vanidad, egoísmo, por un pecado inconfeso que anidó en su corazón, porque aborrece a alguien, porque se ha enojado con su hermano y no le habla, siente envidia de ver cómo Dios le ha levantado y le prospera. Hay cosas que pueden estar afectando la comunión, y la relación con Dios, que pueden encadenarnos, llevándonos a una prisión espiritual, y por eso no se puede alabar a Dios y darle la gloria debida a su nombre. Muchos vienen al templo y se quedan en el atrio y no pueden entrar al lugar santísimo porque para entrar hay que estar limpios de toda inmundicia, en comunión y armonía con las Sagradas Escrituras. Los que se quedan en el atrio hacen a Dios una oración de memoria, mecánica, por lo tanto no están adorando ni alabando a Dios.

Tenemos muchas razones para alabarle, Él nos ha salvado, nos ha sanado y bendecido; pero también tenemos que adorarle y amarle con profundo amor, de corazón, estar enamorados de Dios para poder desear estar en el lugar santísimo y levantar las manos y adorarle en espíritu y en verdad. No por lo que Él nos ha dado sino por lo que Él es. Él es Dios y nosotros sus criaturas por lo tanto le debemos adoración.

¿Qué le ha robado el fervor del comienzo de venir a darle gloria y alabanza a Dios? El libro de Isaías capítulo 52, verso 2, dice el Señor a Su pueblo, leemos: “Sacúdete del polvo; levántate y siéntate, Jerusalén, sueltas las ataduras de tu cuello, cautiva hija de Sion.” Note que Dios le dice al pueblo que se sacuda, que se levante, que se siente y suelte las ataduras. El Señor no dice le voy a soltar las ataduras, sino que da una orden “suelta las ataduras de tu cuello”, es usted que tiene que romper con esas ataduras, compromisos, y esas amistades que lo tienen atado, que no le dejan adorar a Dios. Es usted quien tiene que romper las ataduras.

Amado hermano, no se enamore haciendo yugo desigual no se deje llevar por emociones. Rompa con las cadenas para que quede libre y el espíritu sople de los cuatro vientos y le de nueva visión.

¿Quieres vida? Rompe las ataduras, rompe la máscara que te colocas para venir al culto. Basta ya con la hipocresía religiosa, tenemos que volvernos a Dios y romper  las cadenas para que fluya su gloria y nos santifique. Él quiere una renuncia total, separación total del mundo para que la gloria de Dios descienda sobre su vida. Dios le bendiga.

La iglesia primitiva


Los Padres de la Iglesia escribieron sobre aspectos relacionados a la vida de los primeros cristianos. En este artículo reproducimos los tratados sobre Los Espectáculos y La Vanidad que escriben Tertuliano de Cartago y Clemente de Alejandría.
Los espectáculos
Tertuliano (*) refiriéndose al anfiteatro, decía:
“Si son lícitos el salvajismo, la crueldad y la impiedad, podemos ir al anfiteatro. Hay quien ve con horror el cadáver de un hombre fallecido de muerte natural y, sin embargo, verá sin emocionarse siquiera los trozos ensangrentados de los cuerpos de los gladiadores, a quienes con látigos  y varas se ha obligado a cumplir su criminal tarea. Aun tratándose de los que justamente han sido condenados al anfiteatro, ¿no es monstruoso que, al recibir su castigo, se les obligue a convertirse en asesinos? Yo creería insultar al lector cristiano, al insistir sobre la aversión que deben provocar en él estos espectáculos. Tal vez pudiera yo, mejor que otros, a excepción de los que frecuentan tales espectáculos, entrar en detalles de lo que allí ocurre; pero prefiero ser incompleto, que hacer trabajar mi memoria, recordando aquellas escenas”.

Respecto a los espectáculos en general, escribía:
“Todo eso son verdades pompas del diablo, a las cuales debemos renunciar los cristianos. Para los paganos, el primer indicio de que uno ha aceptado la fe cristiana es que huye de tales espectáculos (…) ¿Cómo pudiera un cristiano recordar a su creador, frecuentado los sitios donde no se habla de Él? ¿Cómo podría tener la paz en su corazón, donde se arman disputas por un cochero? ¿Cómo aprendería a ser casto, presenciado las excitaciones del teatro? ¿Los gritos de los actores podrán recordarle las exhortaciones de los profetas? ¿Las canciones de un cantor afeminado podrán recordarle el canto de los salmos? ¿Se volverá misericordioso, presenciando las quijadas y las esponjas de los gladiadores? ¡Quisiera Dios preservar a su pueblo de todo apasionamiento por tan perniciosos placeres! ¿No sería monstruoso salir de la Iglesia de Dios, para ir a la del diablo? ¿Del cielo al cieno? ¿De levantar las manos a Dios, a ocuparlas después en aplaudir a un actor? ¿O en alabar a un gladiador con la misma boca que se dice amén en el santuario? ¿O en gritar que viva para siempre a cualquier otro que a Dios y a Cristo?”

Aquellos a quienes se dirigían tales acusaciones replicaban, excusándose:
“¿Para qué renunciar a las distracciones públicas, cuando sabemos que Dios nos concede todas las cosas para que usemos de ellas? En ninguna parte de las Escrituras se prohíben los juegos. Elías fue levantado al cielo en un carro; la Escritura nos hablaba de coros, de címbalos, de cornetas y de arpas, y nos dice que David bailaba delante del Arca. El apóstol Pablo, en sus exhortaciones a los cristianos empleaba términos usados en el circo y en las carreras”.

Otros acusándose en su falta de instrucción y de cultura, decían: “No podemos ser todos ni filósofos, ni ascetas. Somos ignorantes y, como no sabemos leer, no comprendemos las Santas Escrituras. ¿Se puede ser más exigente con nosotros?”

Tertuliano replica a los primeros:
“¡Cuán ingeniosa es la ignorancia humana, cuando está excitada por temor a que se le prohíban las diversiones del mundo! Es indudable que todo lo que existe procede de Dios. Lo que importa es conocer cuál ha sido el pensamiento de Dios al crearlo y qué uso se debe hacer, para que responda al deseo del Creador. Es indudable que existe mucha distancia entre la pureza original de la naturaleza humana y su corrupción; entre el que la ha creado y el que la ha pervertido… En algunas ocasiones, hasta puede asegurarse que se trata de cosas agradables, inocentes y, si se quiere, excelentes. Porque nadie mezcla el veneno con el jugo del eléboro, a pesar de que este alimento, perfectamente condimentado, aún siendo de gusto exquisito, no deja de ser menos peligroso”.

Tertuliano, De los espectáculos, cap. XVI al XXV.
El vestido de la mujer
Otro motivo de grandes tentaciones era la costumbre de adornar el cuerpo. Para que nos hagamos cargo de ellos, basta conocer cuántos tratados han llegado hasta nuestro tiempo, y que nos prueban que muchas señoras cristianas rivalizaban en lujo y elegancia con las señoras paganas. El lujo romano estaba en su apogeo por entonces y los ricos lo fomentaban hasta el exceso. Escribía así Tertuliano al principio de su tratado sobre el vestido de la mujer:

“…que si existiese en la tierra fe, en proporción a la recompensa que se espera en el cielo, desde el día en que conocisteis al Dios viviente, ninguna de vosotras, queridas hermanas, se procuraría trajes, ni muy llamativos, ni muy costosos”.

Y entrando en detalles, añade:
“El estuche más pequeño contiene un patrimonio. Al extremo de un hilo, pende un millón de sesterces. Alrededor de una linda garganta cuelgan adornos de tanto valor que, con lo que se invirtió en ellos, se podrían comprar varios bosques y algunas islas. Se gasta una fortuna solo en adornar las orejas, y los adornos de cada dedo de la mano izquierda de una mujer valen por un saco de plata (…) Veo mujeres que se tiñen el pelo con azafrán, como si se avergonzaran de no haber nacido en la Germania (Alemania) o en la Galia (Francia) (…) ¿Cuál de entre vosotros –dice Dios- podrá volver un cabello blanco en negro? Estas mujeres hacen mentir a Dios, puesto que en vez de volver el cabello blanco o negro, lo vuelven rubio y, según ellas, más gracioso”.

Les recuerda también que, cuando menos lo esperen, que puede caer sobre ellas la mano de hierro de la persecución, y pregunta:
“¿Cómo podrá la muñeca, acostumbrada al brazalete en forma de hoja de palmera (spatalis), soportar el hierro de las esposas? ¿Y cómo podrá el talón, tan brillantemente adornado, y después de pisar con tanta majestad, soportar, repito, la opresión del cepo? ¿Las esmeraldas y perlas que cubren el cuello podrán ser reemplazadas  por la cuchilla del verdugo? Se preparan ya los vestidos de los mártires, y los ángeles nos esperan para llevársenos. Disponer para ir a su encuentro, llevando los adornos de los profetas y de los apóstoles. Que vuestro más delicado tinte sea la sencillez; que la rosa de vuestras mejillas sea la modestia y que la gracia de vuestros labios sea el silencio. Haced que en vuestros oídos penetre la Palabra de Dios, llevando en vuestra garganta el yugo de Cristo. Adornaos con la seda de la integridad y con el lino fino de la santidad. Vestidas con tales ornamentos seréis amadas de Dios”. Tertuliano, El vestido de la mujer I, cap. I, IX; II, cap. VI.

Clemente de Alejandría dice sobre el mismo tema:
“Aquellas mujeres que embellecen constantemente su exterior, y cuyo interior está vacío, son parecidas a los templos egipcios. Cierto que tienen pórticos soberbios, salas y corredores adornados con columnas, paredes en donde brilla el oro, piedras preciosas, artísticas pinturas y altares cubiertos con telas bordadas. Si entráis en uno de ellos para conocer a los que están dentro, si deseáis ver al dios, cuando el sacerdote haya levantado la cortina, os encontraréis en presencia de un gato o de un cocodrilo”.

Donde las señoras romanas lucían particularmente su belleza y sus ricos vestidos era en los baños públicos. Estos establecimientos, de grandes proporciones, podían albergar a millares de personas de uno a otro sexo. Allí se veían mujeres que, para llamar la atención, traspasaban con exceso los límites de la modestia. Clemente hace una brillante descripción del lujo que ostentaban aquellos establecimientos. Levantábanse tiendas de telas finas, que se adornaban con dorados muebles y con vasos de oro y plata, que servían para la comida y para el baño.

(*) Tertuliano (160 D.C.– 220 D.C.) fue un líder de la Iglesia y un prolífico escritor durante la segunda parte del siglo segundo y primera parte del tercero. Nació, vivió y murió en Cartago en el actual Túnez. Él fue quien inmortalizó la famosa frase: “La sangre de los mártires es semilla de nuevos cristianos”.

Clemente de Alejandría fue el primer miembro de la Iglesia de Alejandría en recibir notoriedad además de ser uno de los más destacados maestros de dicha ciudad. Nació a mediados del siglo II y se estima que murió entre los años 211 y 216.
(Tomado del libro “Historia de la Iglesia Primitiva” por E. Backhouse y C. Tyler)

¿Cómo aprendería a ser casto, presenciado las excitaciones del teatro? ¿Los gritos de los actores podrán recordarle las exhortaciones de los profetas? ¿Las canciones de un cantor afeminado podrán recordarle el canto de los salmos? ¡Quisiera Dios preservar a su pueblo de todo apasionamiento por tan perniciosos placeres! 

Que vuestro más delicado tinte sea la sencillez; que la rosa de vuestras mejillas sea la modestia y que la gracia de vuestros labios sea el silencio. Haced que en vuestros oídos penetre la Palabra de Dios, llevando en vuestra garganta el yugo de Cristo. Adornaos con la seda de la integridad y con el lino fino de la santidad.

¿Pudo Sansón destruir un templo entero?


Dos templos filisteos han sido descubiertos por arqueólogos. Uno en Tel Qasile, en el norte de Tel Aviv, y uno en Tel Migne, el antiguo Ekron, 33.6 Km. al sur de Tel Aviv. Ambos templos comparten un diseño único, el tejado estaba sostenido por dos pilares centrales.
¿Han descubierto los arqueólogos alguna información que se relacionara a este hecho?

Un gran cambio que hubo en la guerra de Israel contra los filisteos fue la muerte de Sansón. Él había sido tomado cautivo a través de la decepción de Dalila. Los filisteos sacaron sus ojos y lo llevaron a Gaza, una de sus principales ciudades. Allí, ellos lo pusieron a trabajar moliendo grano en una prisión. Nosotros sabemos por los hallazgos arqueológicos que este tipo de prisión era en realidad una “molienda”. Uno de los trabajos que más tiempo consumía en la antigüedad era el moler grano. En la clase media, este trabajo era tomado por las mujeres de la casa. La aristocracia burocrática, sin embargo, preparó casas de molienda para proveer de grano a la gente privilegiada de nivel alto. Este era un lugar donde esclavos y prisioneros eran puestos a trabajar. Las herramientas eran simplemente piedras utilizadas con la mano. Sansón pasó sus días sentado en la tierra moliendo grano con un moledor manual que era frotado de un lado en un mortero que ponía en su falda.

Un día los líderes filisteos sostuvieron una ceremonia religiosa para celebrar su victoria sobre su enemigo. Ellos trajeron a Sansón al templo donde estaban congregados, para que él pudiera entretenerlos. Una vez dentro del templo, Sansón le preguntó al sirviente, quien estaba guiándolo, que le muestre dónde estaban los pilares, para que se pudiese apoyar en ellos. “Asió luego Sansón las dos columnas de en medio, sobre las que descansaba la casa, y echó todo su peso sobre ellas, su mano derecha sobre una y su mano izquierda sobre la otra. Y dijo Sansón: Muera yo con los filisteos. Entonces se inclinó con toda su fuerza, y cayó la casa sobre los principales, y sobre todo el pueblo que estaba en ella. Y los que mató al morir fueron muchos más que los que había matado durante su vida” (Jueces 16: 29-30).

En un súbito momento, Sansón eliminó a todos los líderes filisteos. Este fue un gran retroceso en el conflicto con Israel. Fue un gran cambio. Desde este tiempo hacia adelante, los israelitas empezaron a ganar. Pero ¿habrá pasado realmente? ¿Podría un solo hombre destrozar un templo entero utilizando sólo sus manos? La arqueología nos ha proporcionado algunas respuestas asombrosas.

Dos templos filisteos han sido descubiertos por arqueólogos. Uno en Tel Qasile, en el norte de Tel Aviv, y uno en Tel Migne, el antiguo Ekron, 33.6 Km. al sur de Tel Aviv. Ambos templos comparten un diseño único, el tejado estaba sostenido por dos pilares centrales. Los pilares fueron hechos de madera y se apoyaban en bases de piedra. Si los pilares estaban aproximadamente 1.80 m. aparte, un hombre fuerte podría dislocarlos de su piedra base y así de esta forma dejar caer el tejado entero al suelo. Los hallazgos arqueológicos concuerdan perfectamente con la historia bíblica y atestan a la plausibilidad del hecho.

Aunque Sansón tenía sus debilidades, él era un hombre de Dios y es mencionado en el Nuevo Testamento como uno de aquellos “que por fe conquistaron reinos,... sacaron fuerzas de debilidad” (Hebreos 11: 32-34).

Fuimos hechos del polvo de la tierra



En realidad ¡fuimos formados de la tierra! Lo que dice la ciencia más moderna sobre los elementos que componen el cuerpo de los seres humanos.
En Génesis 2:7 leemos que Dios creó al hombre a partir del barro de la tierra: "Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente”.
 
¿QUÉ HAY DE CIERTO EN QUE FUIMOS HECHOS DEL POLVO?
Por descabellada que pueda parecerle esta declaración, no se apresure a juzgarla sin antes darnos la oportunidad de que le expongamos lo que dice la ciencia más moderna sobre los elementos que componen el cuerpo de los seres humanos:

Los elementos que forman parte de los seres vivos reciben el nombre de bioelementos o elementos biogenésicos. Si analizamos la composición de los seres vivos se pueden apreciar a lo menos unos 70 bioelementos de los cuales unos 20 son imprescindibles para la vida. Los bioelementos se clasifican en: Bioelementos primarios: Son aquellos que se encuentran en proporción igual o superior al 1% del peso total del cuerpo. Pertenecen a este tipo: el Carbono (C), el Oxígeno (O), el Hidrógeno (H), el Nitrógeno (N), el Calcio (Ca) y el Fósforo (P).

Bioelementos secundarios: Son aquellos cuya concentración en las células es entre 0.05 y 1 %, también reciben el nombre de microelementos. Entre ellos se encuentran: el Sodio (Na), el Potasio (K), el Cloro (Cl), el Magnesio (Mg), y el Azufre (S).

Oligoelementos: Son aquellos que se encuentran representados por átomos cuya concentración celular es menor que 0,05 %. Entre ellos se encuentran: el Fierro (Fe), el Cobre (Cu), el Manganeso (Mn), el Flúor (F), el Zinc (Zn), el Molibdeno (Mb), el Boro (Bo), el Silicio (Si), el Cobalto (Co) el Yodo (I) y el Selenio (Se). Estos elementos son llamados también elementos trazas por la baja concentración en que se encuentran.

Todos estos elementos se encuentran o forman parte de la tierra en que vivimos y por lo tanto la frase bíblica, en su simplicidad, es científica y literalmente correcta: ¡Fuimos formados de la tierra!"

“Toda carne perecerá juntamente, y el hombre volverá al polvo", Job 34:15

La naranja y el ateo



Un profesor ateo dictaba una conferencia ante un gran auditorio sobre la existencia de Dios, y después de haber finalizado su discurso, invitó a cualquiera que tuviese preguntas a que subiera a la plataforma.
Después de unos momentos un hombre que había sido bien conocido en la localidad por su afición a las bebidas embriagantes, pero que había sido salvo recientemente, aceptó la invitación, y sacando una naranja del bolsillo comenzó a pelarla lentamente.

El conferencista le pidió que hiciera la pregunta; pero el hombre continuó imperturbable pelando la naranja, al término de lo cual, se la comió. Cuando terminó de comérsela se volvió al conferencista y le preguntó:

- ¿Estaba dulce o agria?

- No me pregunte tonterías - respondió el orador con señales evidentes de enojo - ¿Cómo puedo saber el gusto si no la he probado?

El hombre convertido respondió entonces:

-Y ¿Cómo puede usted saber algo de Cristo si nunca lo ha probado?

“Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, e hicieron abominable maldad; no hay quien haga bien”, Salmo 53:1.

El ladrón convertido



Moody cuenta el caso de un ladrón llamado Burke, quien leyó en la cárcel un sermón en el diario de la ciudad, cuyo título era: “El carcelero atrapado”. El título le sugestionó pensando que sería una interesante historia carcelera.
Era, naturalmente, la del capítulo 16 del libro de los Hechos. La pregunta del desesperado guardián de presos le interesó y también la respuesta del apóstol. El mensaje de la salvación llegó a su alma y fue convertido.
Años más tarde Moody visitó a esta “nueva criatura en Cristo”, viéndole rodeado de joyas y valores, pues era nada menos que el guardián de la caja fuerte de un banco.

¡La Biblia no deja de sorprendernos¡



Fue el primer libro religioso que fue llevado al espacio exterior (en microfilm). Es el primer libro leído que describe el origen de la tierra (los astronautas leyeron Génesis 1:1 -“En el principio... Dios...”). Y ahora piense: Voltaire dijo que en 1850 este libro estaría extinguido.
Los rusos vendieron el Códice Sinaítico (una de las copias más antiguas de la Biblia) a Inglaterra en 510,000 dólares.

El telegrama más largo del mundo fue la Versión Revisada del Nuevo Testamento, enviada desde Nueva York a Chicago.

Cúpula de la Roca



La Cúpula de la Roca (en lengua árabe, قبة الصخرة Qubbat as-Sajra) es un templo islámico situado en Jerusalén, en el centro del Monte del templo.

Fue construido entre los años 687 y 691 por el noveno califa, Abd al-Malik. También se le conoce como la mezquita de Umar (aunque en realidad no es una mezquita al uso) debido a que es el lugar donde el segundo califa Umar rezó tras la conquista de Jerusalén por parte de los musulmanes. Los musulmanes consideran además que éste fue el lugar donde Mahoma subió al cielo.

Según la tradición, la Cúpula se construyó en honor a Alá. Es uno de los lugares más representativos de Jerusalén.

Los musulmanes creen que la roca que se encuentra en el centro de la Cúpula es el punto desde el cual Mahoma ascendió a los cielos para reunirse con Alá, acompañado por el ángel Gabriel. Es un lugar sagrado para los musulmanes.

Los judíos afirman que ese lugar fue donde Abraham estuvo a punto de sacrificar a su hijo Isaac por orden de Jehová, donde Jacob vio la escalera al cielo, y donde se encuentra el corazón del templo de Jerusalén. Otras tradiciones judías dicen que es el punto donde se puso la primera piedra para construir el mundo. El Islam recoge también la tradición del sacrificio de Abraham, aunque en la tradición islámica el hijo no era Isaac sino el primogénito, Ismael.

Sin cambios esenciales durante más de trece siglos, la Cúpula de la Roca sigue siendo uno de los más preciosos y duraderos tesoros arquitectónicos del mundo.

No parar para ser servido



Oyendo un joven campesino Inglés que el doctor Morrison, misionero en la China, pedía un ayudante, vino a ofrecer sus servicio a un miembro del comité misionero, quien quedó asombrado de ver a un joven falto de instrucción, y cubierto con malos vestidos aspirar a ser el auxiliar del traductor de la Biblia al idioma Chino.
Por otra parte había en este ofrecimiento tanta sencillez, buena fe y resolución, que no se sintió libre para despedirle y acabó por decirle:

- Amigo, ni yo ni mis compañeros podemos consentir en enviar a usted a china como misionero, pues para esto se necesita instrucción y dotes especiales que usted no tiene; pero si no le repugna ir allí como criado del señor Morrison gustoso le proporcionamos los medios de acompañarle.

- Señor, -contestó humildemente el joven- lo que deseo es servir al Señor en China, sea como misionero, sea como criado. Seré, lo que usted disponga que sea, para servicio de mi adorable Salvador.

Dios bendijo su humildad, y ratificó su decisión de tal manera, que el joven campesino, pobre e ignorante, llegó a ser más tarde el célebre Doctor Milne; uno de los misioneros más distinguidos de la iglesia contemporánea.

Dios ensalza a los humildes.

La respuesta de Justino al procónsul




Cuando Justino Mártir fue presentado con otros seis cristianos ante Rusticus, el prefecto de Roma, les preguntó: ¿Suponéis que si fueses azotados y vuestras cabezas cortadas subirías al cielo para ser recompensados?
Justino le contentó:

- No lo supongo; lo sé y estoy plenamente convencido de ello.

El mismo día los prisioneros, después de ser azotados fueron conducidos al suplicio, donde murieron glorificando a Dios.

¿Cuál es la edad de la tierra?


Cuando empezamos en el Génesis y sumamos todas las fechas que nos da la Biblia, encontramos que Dios creó todo sólo hace unos cuantos miles de años atrás.
¿Cuántos años tiene la tierra?

El hecho que de acuerdo con la Biblia, Adán fue creado en el sexto día de la existencia de nuestro planeta, podemos determinar con bases bíblicas la edad aproximada de la tierra, viendo los detalles cronológicos de la raza humana. Esto por supuesto asume que los datos de Génesis son precisos, que el sexto día de la creación descrito en Génesis fue literalmente un período de 24 horas, y que no hubo intervalos cronológicos ambiguos.

Las genealogías descritas en los capítulos cinco y once de Génesis, nos dicen la edad en la cual Adán y cada uno de sus descendientes iniciaron la siguiente generación en una ancestral línea sucesiva desde Adán hasta Abraham. Determinando dónde encaja Abraham cronológicamente en la historia y añadiendo las edades mencionadas en los capítulos cinco y once de Génesis, la Biblia enseña que la tierra tiene aproximadamente 6,000 años de edad, agregando o restando algunos pocos cientos de años.

¿Qué hay de la popular idea de que tiene 4.6 billones de años, aceptada por la mayoría de los científicos actuales y enseñados en la gran mayoría de las instituciones académicas? Esta edad es primeramente derivada de dos datos técnicos: el método del carbono 14 que determina la edad de vestigios orgánicos (radiometría), y la escala del tiempo geológico. Los científicos que abogan por una edad menor de aproximadamente 6,000 años, insisten que la prueba del carbono 14 es defectuosa porque se basa en una serie de suposiciones inexactas, mientras que la escala del tiempo geológico es poco acertada, porque emplea un razonamiento circular. Es más, ellos exponen la falsedad de los antiguos mitos sobre la edad de tierra; como la popular y malentendida creencia de que la estratificación, fosilización y la formación de diamantes, carbón, petróleo, estalactitas y estalagmitas, etc., requieren de largos períodos de tiempo para su formación.

Finalmente, los defensores de una menor edad de la tierra, presentan evidencias positivas, en vez de las evidencias presentadas para una larga edad, las cuales son invalidadas por ellos. Los científicos partidarios de una tierra joven, saben que representan actualmente una minoría, pero insisten en que sus seguidores aumentarán con el tiempo, mientras más y más científicos reexaminan la evidencia y ven más de cerca el paradigma actualmente aceptado de una tierra vieja.

Ya sean 6,000 o 4.6 billones de años – ambas posturas (y todas aquellas en medio de estas) se basan en la fe y las suposiciones. Aquellos que sostienen los 4.6 billones de años, confían en que los métodos tales como la radiometría son confiables, y que nada ha ocurrido en la historia que pueda haber perturbado la desintegración del radio-hisopo. Los que sostienen los 6,000 años, confían en que la Biblia es la verdad, y que otros factores explican la “aparente” edad de la tierra, tales como el diluvio universal, o la creación de Dios del universo en un estado que “parece” darle una muy larga edad. Como ejemplo tenemos que, Dios creó a Adán y a Eva como seres humanos adultos y desarrollados. Si un doctor hubiera tenido que examinar a Adán y a Eva en el día de su creación, el doctor habría estimado su edad en 20 años (o cualquier edad que ellos parecían tener) – cuando, de hecho, Adán tenía menos de un día de su creación. Cualquiera que sea el caso, siempre hay una buena razón para confiar en la Palabra de Dios sobre las palabras de científicos ateos con una agenda evolucionista.

Cuando un cristiano le diga que la Tierra tiene miles de millones de años, pídale a esa persona que le muestre dónde se encuentra en la Biblia. El punto es que si Ud. toma la Biblia sola, nunca tendrá la idea de miles de millones de años. Entonces, ¿podemos saber la edad de la tierra?

¡Cuando empezamos en el Génesis y sumamos todas las fechas que nos da la Biblia, encontramos que Dios creó todo sólo hace unos cuantos miles de años atrás! ¡Decir que la creación sucedió hace millones de años es simplemente llamar a Jesucristo, a Pedro, a Pablo y a varios otros hombres de Dios, mentirosos!

¿De dónde vienen las razas?


“Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra...” allí confundió Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra”, Génesis 11:8-9.
La Biblia nos indica que todos los humanos hoy en la tierra descienden de Noé y su esposa, sus tres hijos y sus esposas, o sea de Adán y Eva. Debido al hecho de que existen diferencias obvias entre el color de la piel de diferentes grupos étnicos, muchas personas han dudado del recuento bíblico, afirmando que tal diversidad sólo podría suceder si se evoluciona separadamente por decenas de miles de años.

Debemos iniciar este artículo con afianzar que está comprobado que hay sólo una raza, por supuesto la raza humana. La Biblia nos enseña que Dios "de una sangre ha hecho Dios todo el linaje de los hombres" (Hechos 17:26). La Biblia distingue a las personas por agrupaciones tribales o nacionales, no a través del color de la piel o por la apariencia física.

Aunque hay diferencias físicas entre "las razas," o propiamente dicho, entre los grupos étnicos, las diferencias no son realmente tan grandes. Aún los evolucionistas no afirman orígenes separados de la evolución para las razas, estando de acuerdo que todos los humanos descienden de una población común. Por supuesto, ellos afirman que grupos como los Aborígenes o los chinos han tenido decenas de miles de años de separación para que ocasionen sus rasgos físicos tan diferentes.

"Muestras de genéticas modernas demuestran, sin embargo, que cuando un gran grupo, que se cruza libremente es repentinamente dividido en muchos grupos más pequeños entre los cuales desde aquel momento se engendran tan sólo entre ellos, las diferentes características raciales sucederían muy rápidamente. Una lección simple de herencia muestra que un par de padres medio-castaño podría producir todos los matices de color conocidos, de muy blanco a muy negro, en tan sólo una generación" (The Answers Book. Edición Revisada. Ken Ham, Andrew Snelling y Carl Wieland. Amo Books, 1992).

La Biblia nos dice que semejante evento ocurrió brevemente después del Diluvio. Por unos pocos siglos, había sólo un idioma y un grupo cultural. Entonces, no había ninguna barrera de matrimonios dentro de este grupo. Esto tendería a mantener el color de la piel de la población lejos de los extremos, o muy negros o muy blancos.

La piel un tanto oscura o un tanto blanca aparecería, pero estas personas, al casarse con alguien menos oscuro o menos claro que ellos, garantizaría que el color promedio se quede aproximadamente igual. Bajo estas circunstancias, las líneas raciales distintas nunca habrían surgido. Este es el caso en países donde todos son blancos o todos son negros. Mientras no exista mezcla, todos continuarán siendo o todos blancos, o todos negros. Lo mismo sucedió donde todos eran de un solo color. Esto es verdad tanto como para los animales como para la población humana.

Para obtener las líneas separadas que observamos hoy, usted necesitaría dividir un grupo grande en grupos más pequeños y así mantenerlos por separado, es decir, no cruzándolos más.

Esto es exactamente lo que pasó en Babel. Después del Diluvio, Dios les dijo a Noé y a su familia que debían llenar la tierra con sus descendientes. Sin embargo, después de sólo unas pocas generaciones, estaba claro que las personas habían decidido desobedecer a Dios y continuar viviendo como una sola población.

"Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí", Génesis 11:1-2.

Pues en Babel Dios hizo a las personas hablar en idiomas diferentes y esto causó que fueran esparcidos a través de la faz de la tierra.

Después de un tiempo de estar separados y estar hablando un idioma diferente al de sus vecinos, aparecieron las barreras instantáneas que Dios anticipó para que así en efecto "llenaran la tierra".

"Ahora, pues, descendamos y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero. Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra... allí confundió Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra", Génesis 11:1:7-9.

De esta forma, las personas tenderían a casarse sólo con alguien que ellos pudieran entender, porque de otra forma grupos enteros que hablaran el mismo idioma tendrían dificultades de relacionarse y de confiar en aquéllos que no lo hicieron. Así, la humanidad estuvo dividida en grupos que a su vez pasarían genéticamente a sus descendientes características comunes, tales como el color, la forma de la nariz, de los ojos, etc. Fue así como gracias a grupos más pequeños y por consiguiente, grupos pasando a sus descendientes características adoptadas de adaptación, se empezaron a desarrollar distintas características físicas en un período de tiempo muy corto.

Este modo de explicar lo sucedido resuelve tantos problemas que el Evolucionismo no es capaz de resolver. Todo claramente apoyado por la Biblia (historia) y por la Ciencia (Creacionismo Científico).

La exactitud de la palabra de Dios


Rev. Luis M. Ortiz
La Biblia repite constantemente una frase, que es, precisamente la clave principal de todas. Esa frase es: “Y dijo Dios”. Sobre esto mismo se escribió: “Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la Palabra de Dios” (Hebreos 11:3).
Hace algún tiempo, leí en la prensa diaria un artículo cuyo contenido lo considero mucho más trascendental que el hecho de que el hombre haya llegado a la luna. El título del artículo es como sigue: “Falta un día entero desde la formación del universo”.

Y deseo insertar este interesante artículo, y citamos: “La historia trata de un día que falta en el tiempo y que descubrió y narró Harold Hill, presidente del Curtis Engine Company de Baltimore, Maryland, y consultor en el programa espacial. El Señor Hill dijo que creía que una de las cosas más asombrosas que Dios tiene para nosotros hoy, le ocurrió a nuestros astronautas y científicos del espacio en Green Belt, Maryland. Ellos intentaban determinar la posición del sol, la luna y los planetas al pasar cien años y al pasar mil años. Para poder determinar las posiciones futuras tendrían que saber cuáles fueron sus posiciones en el pasado.

Averiguaron cuales fueron las posiciones durante los siglos pasados y de momento se detuvieron. Las computadoras señalaron que algo andaba mal, o con la información sometida o con los resultados obtenidos faltaba un día en la historia del tiempo. Los científicos estaban confundidos. No había una contestación.

Uno de ellos recordó un comentario tocante al sol en la Biblia. Al investigar encontraron en el libro de Josué una oración bastante ridícula para cualquiera con “sentido común”. De acuerdo con las Escrituras, Josué estaba preocupado porque estaba rodeado de sus enemigos y al llegar la noche lo vencerían, como resultado, él le pidió a Dios que hiciera que el sol se detuviera. Pues, el sol se detuvo en medio del cielo, y no bajó por casi un día entero (Josué 10:13). ¡Se había encontrado el día que faltaba!

Al regresar las computadoras a la fecha que Josué había escrito la oración, encontraron que sus cálculos casi estaban correctos. El tiempo que había transcurrido para el tiempo de Josué fue de 23 horas y 20 minutos… no fue un día completo. Volvieron a leer las Escrituras y encontraron que decía: “aproximadamente un día completo”. Aún no podían explicar lo que sucedió con los restantes 40 minutos porque al proyectar las órbitas en el espacio este tiempo se multiplicaría.

Otra vez la misma persona se acordó de que en algún otro sitio en la Biblia decía que el sol caminó hacia atrás. En el segundo libro de los Reyes, capítulo 20, Ezequías, en su lecho de muerte, fue visitado por el profeta Isaías, a quien le pidió una señal como prueba. Isaías dijo: “¿Avanzará la sombra diez grados, o retrocederá diez grados? Y Ezequías respondió: Fácil cosa es que la sombra decline diez grados; pero no que la sombra vuelva atrás diez grados” (2 Reyes 20:9-10). ¡Diez grados hacia atrás son exactamente 40 minutos!... 23 horas y 20 minutos en Josué, además de 40 minutos en el Segundo Libro de Reyes, constituyen las 24 horas que faltan en los cálculos espaciales como el día que falta en el universo”.

Amigos, aquí una vez más la ciencia ha tenido que recurrir a la Biblia, la Palabra de Dios, para resolver sus problemas científicos. ¡Es que nada en la vida, en la muerte, en la creación, en el espacio, en el tiempo y en la eternidad halla explicación aparte de Dios y su Palabra! En este artículo mencionado, vemos cómo la Biblia resolvió el problema científico revelado por las computadoras, sobre la falta de un día entero desde la fundación del mundo. ¡Es que la fuente de la verdadera ciencia es la Palabra de Dios!

En el relato bíblico sobre el origen del universo, del mundo, del hombre, y de la vida en todas sus formas la Biblia repite constantemente una frase, que es, precisamente la clave principal de todas. Esa frase es: “Y dijo Dios”. Esto es, todo vino a la existencia y a la vida por medio de la Palabra de Dios. Sobre esto mismo el apóstol Pablo escribió: “Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la Palabra de Dios” (Hebreos 11:3).

Evidencias arqueológicas y la veracidad de la Biblia


La historia nos da la cronología, los acontecimientos, los pueblos y los lugares. Lo que la arqueología ha hecho en los últimos cien años es verificar parte de la historia contenida en la Biblia.
¿Cómo se relacionan los descubrimientos arqueológicos con los sucesos de las Escrituras?

La arqueología es el estudio de las ruinas no perecederas, que han sobrevivido a los ataques del tiempo. Su motivación inicial fue cavar en busca de tesoros dejados por civilizaciones antiguas.

Hoy en día, sin embargo, se usan los métodos científicos más modernos para recuperar y estudiar los restos del pasado, a fin de lograr una mejor comprensión de los pueblos antiguos y sus costumbres. El Oriente Medio, en particular la zona de la Palestina, es objeto de muchas excavaciones arqueológicas, debido a la continuidad de su historia.

Es importante anotar que la arqueología, sin la historia, carece de significado. Todo lo que la arqueología nos puede decir, es una secuencia de desarrollo cultural, y no nos da una cronología exacta. La historia nos da la cronología, los acontecimientos, los pueblos y los lugares.

Lo que la arqueología ha hecho en los últimos cien años es verificar parte de la historia contenida en la Biblia. Por ejemplo, dos de las ciudades mencionadas en la Biblia, Sodoma y Gomorra, han sido consideradas como mitológicas durante muchos años.

Sin embargo, excavaciones recientes en Tell Mardikh, que se sabe ahora que fue el sitio de Ebla, dejaron al descubierto 15,000 tablas escritas. Algunas de ellas han sido traducidas, y en ellas se menciona a Sodoma y Gomorra.

Entre otras verificaciones arqueológicas están las pruebas de que hubo un gobernante llamado Belzasar; de que los hititas no sólo existieron, sino que tuvieron un vasto imperio; de que el rey Sargón también gobernó; también los detalles históricos del libro de los Hechos se demuestran con precisión. Hasta ahora, los resultados de la arqueología han verificado, y en ningún caso disputaba los puntos históricos del relato bíblico.

Aunque la arqueología puede verificar la historia y dar a luz sobre varios pasajes de la Biblia, la prueba de que la Biblia es la Palabra de Dios está fuera de su campo. Actualmente, la arqueología es una ciencia que progresa con datos limitados; pero aun con sus limitaciones, esta disciplina es muy útil para mostrar que muchos pasajes bíblicos son históricamente exactos.

Nunca insistiremos bastante en que la Biblia presenta un cuadro histórico preciso. El cristianismo es una fe histórica, que sostiene que Dios ha participado en la historia con muchos actos poderosos.

Aunque los milagros presentados en las Escrituras no se pueden probar ni repetir científicamente debido a su naturaleza, se pueden investigar las personas, lugares y sucesos, históricamente. Si los escritores bíblicos fueron inexactos en su cuadro histórico, se pondrían graves dudas en cuanto a su certeza en las partes que no pudieran verificarse.

En otras palabras, si los autores de las Escrituras son exactos en sus relatos de las cosas que ocurrieron, se debe llegar a la conclusión de que no se pueden rechazar porque mencionaran cosas fuera de lo común.

EVIDENCIAS BÍBLICAS

Construcciones

Algunas de las estructuras bíblicas más interesantes que fueron encontradas y excavadas:

La base de la torre de Babel (Génesis 11: 1-9); el palacio de Jericó (Jueces 3: 12-30); el templo de Baal/El Berith in Siquem (Jueces 9:4,46-49); el estanque de Gabaón (2 Samuel 2: 12-32); el palacio de Babilonia donde Daniel interpretó la escritura en la pared (Daniel 5); la casa de Pedro en Capernaum donde Jesús sanó la madre de Pedro (Mateo 8: 14-16).

Jericó

Se encontró la ciudad de Jericó que fue edificada varias veces. De una excavación se halló que la ciudad fue arrasada, que sus muros fueron destruidos menos uno (donde estaba Rahab).

Sansón y el templo filisteo

Se encontraron templos filisteos con una extraña construcción: su techo estaba esencialmente sostenido por dos columnas de madera en el centro del templo. De manera que un hombre muy fuerte podría haber tirado el techo abajo.

Sodoma y Gomorra

Ahora a Sodoma y Gomorra se le llama Bab edh-Dhra. Está en la localización que la Biblia dice. Los arqueólogos encontraron que las casas fueron destruidas por fuego que comenzó de arriba.

Las 95 Tesis de Martín Lutero


Con sus 95 tesis, Martín Lutero quiso impulsar una reforma de la Iglesia Católica Romana, pero sin proponérselo se convirtió en fundador de una segunda confesión cristiana.

Martín Lutero (1483-1546) oficiaba desde 1514 como sacerdote en la Iglesia de la ciudad de Wittenberg. Su comunidad apreciaba al popular predicador que se había hecho notar por su talento retórico. A menudo se quedaba en su cuarto absorto leyendo la Biblia. Lutero quería descifrar a través de las Sagradas Escrituras la relación entre Dios y los hombres. Una relación que hacía mucho había quedado aclarada, según la Iglesia Católica: Dios se dirigía a los hombres a través del Papa en Roma y a través de los representantes del Santo Padre, los sacerdotes y obispos. Con ello la Iglesia de Roma podía reclamar para sí la interpretación universal de la Biblia y establecer sanciones a quienes contravinieran sus reglas.

95 tesis contra los abusos de la Iglesia

Martín Lutero, en cambio, hizo una nueva interpretación de los Evangelios del Nuevo Testamento, que derivó en otro paradigma cristiano. Para él no había una “mediación apostólica” en la relación entre Dios y los hombres. Lo único que valía eran las Sagradas Escrituras (primacía de las Escrituras), Jesucristo (primacía de Cristo) y la gracia de Dios (primacía de la gracia y de la fe). El detonante de la Reforma fue el comercio de indulgencias, cuyos beneficios iban a ser destinados a la construcción de la Basílica de San Pedro en Roma, pero también a mantener el lujoso estilo de vida del Papa Leo X (1475-1521), que se encontraba siempre notoriamente al borde de la bancarrota.

Cuando Martín Lutero escribió sus 95 tesis en la habitación de su vivienda de párroco de la Iglesia de Wittenberg, buscaba únicamente poner un alto a lo que él consideraba anomalías en la Iglesia Católica Romana (la secularización, la evasión del celibato). No era su intención entrar en conflicto con el Papa ni tampoco fundar su propia Iglesia. Por ello no clavó tampoco las tesis ese memorable 31 de octubre de 1517 en la puerta de la Iglesia de Wittenberg, sino que las envió para su discusión a colegas y amigos. Ese día no fue un revolucionario, sino un monje preocupado por la salvación de las almas de los miembros de su comunidad. La reacción a las tesis, que se propagaron rápidamente, convirtió a ese angustiado monje en un revolucionario que trastornó de manera perdurable el mundo medieval y cuyos efectos en la historia no tienen parangón.

El reformador fuera de la ley – Lutero no se desdice

El Papa Leo X intentó llamar al orden al monje de Wittenberg amenazándolo con la excomunión, anatemas y en abril de 1521 con un proceso ante la Dieta Imperial de Worms, sin éxito. Martín Lutero no se desdijo de sus tesis en Worms, lo que fue documentado con una “proscripción imperial” (Reichsacht) y acto seguido fue declarado fuera de la ley. En su posterior huída de los alguaciles de la Inquisición, Lutero no sólo pudo contar con un amplio apoyo entre la población, sino sobre todo con la ayuda del príncipe elector de Sajonia, Federico III “el Sabio” (1463-1525). El príncipe elector ocultó a Lutero en el Castillo de Wartburg, donde bajo el seudónimo de Caballero Jorge (Junker Jörg) se dedicó a traducir el Nuevo Testamento al alemán.

Por una parte sus enseñanzas se propagaron rápidamente en el continente europeo. Pero por la otra, el conflicto con la Iglesia Católica, como se pasó a autodenominar la Iglesia romana del Papa, fue adquiriendo dimensiones cada vez más violentas. Ambos bandos comenzaron a armarse. Ese conflicto religioso desembocó finalmente en la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), tras la cual la libertad religiosa en Alemania y Europa quedó sellada a través de tratados.

Israel recuerda el Holocausto con sirenas en todo el país


La población conmemora hoy el Día del Holocausto, uno de los más solemnes de su calendario, con una serie de actos de recuerdo en todas las instituciones públicas y el ulular de una sirena que a las 10.00 de la mañana que paralizó todo el país.
La potente sirena antiaérea, que se escuchó en todas las ciudades y pueblos, detuvo el tráfico en calles y cruces, mientras los conductores salían de sus automóviles para, con los transeúntes, ponerse firmes en señal de respeto.

Tan sólo los miembros de la minoría árabe -que no se identifican con la jornada-, y muchos de la comunidad ultraortodoxa judía -que consideran Israel un sacrilegio a sus estrictas creencias religiosas- se inhibieron de esta vieja tradición que acompaña las dos jornadas de luto nacional del calendario.

La otra es en el día de recuerdo a los soldados caídos o desaparecidos en el campo de batalla, que se conmemora la semana que viene, en la víspera del día de independencia.

Hoy, el recuerdo fue para los 6 millones de judíos asesinados por los nazis en el período de la Segunda Guerra Mundial, desde la aprobación de las primeras leyes raciales de Nuremberg en 1935 -que privaron a los judíos alemanes de todos sus derechos civiles-, hasta la aplicación de la Solución Final para el judaísmo europeo en los campos de extermino.

A raíz de ese genocidio, los aliados dieron luz verde a la creación del Estado judío en 1948, acontecimientos ambos que salen a la luz en los actos de esta jornada.

"El Día del Holocausto en Israel tiene dos facetas, la primera (de carácter) nacional, es que tenemos un hogar nacional para el pueblo judío, y la segunda es que el pueblo judío no fue aniquilado tal y como lo tenía programado el nazismo", dijo a Elías Soae, un ex policía de origen argentino.

Como otras conmemoraciones y fiestas del calendario judío, la jornada comenzó el anochecer anterior con un acto en el Museo del Holocausto de Jerusalén, en el que el primer ministro, Biniamín Netanyahu, afirmó que si el Estado de Israel hubiera existido entonces, el genocidio no habría ocurrido.

"Nuestros enemigos intentaron enterrar el futuro judío, pero éste renació en la tierra de nuestros antepasados, aquí construimos nuestra base y un nuevo comienzo de libertad y esperanza", afirmó poco después de que supervivientes encendieran seis antorchas de recuerdo, una por cada millón de judíos asesinados.

Israel fijó esta jornada una semana antes del día de su independencia para resaltar el vínculo entre ambos capítulos de su historia, pero en Occidente el Día Internacional del Holocausto se conmemora el 27 de enero, fecha de la liberación del campo de extermino de Auschwitz (Polonia).

Netanyahu y otros destacados líderes políticos, judiciales, religiosos y militares, participaron de nuevo esta mañana en otro acto oficial en el mismo Museo, que guarda el recuerdo de los 6 millones de víctimas y la identidad de la mitad de ellas.

En la lectura de sus nombres hoy en el Parlamento, el primer ministro afirmó que "esta es una forma de dar vida a las almas perdidas".

También recordó en su discurso que el peligro sobre el pueblo judío no se ha desvanecido y que, en la actualidad, sigue afrontando "llamamientos a exterminarlo", mencionando a Irán como "centro de esa amenaza existencial".

Soae explica que el pueblo judío "ciertamente" ve en el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, un peligro a su existencia.

"Que Ahmadineyad, y no hablo del pueblo iraní sino específicamente de Ahamdineyad, amenace con aniquilar al pueblo judío y niegue el Holocausto, ciertamente es percibido como una amenaza", afirmó.

En los últimos meses, Israel ha advertido que no tolerará que el jefe de un Estado que insta a "borrarla del mapa" tenga también la capacidad militar para intentarlo, lo que hace temer un ataque israelí contra el programa nuclear de Teherán, si fracasan las conversaciones que comenzaron el sábado en Estambul entre el Grupo 5+1 e Irán. EFE

Les quitan a sus hijos por seguir a Jesús



Beniam, un converso al cristianismo al igual que su esposa han pagado un alto precio por seguir a Jesús, porque Demissie* (papá de Beniam), un fiel musulmán y al darse cuenta que su hijo y su nuera, habían apostatado del Islam para convertirse en cristianos, este, decidió llevarse a sus nietos y alejarlos de sus padres.
“Ni cuando te mueras iré a tu funeral, ya no eres mi hijo, usted está muerto para mí”, le dijo Demissie, a su hijo Beniam.

“Mi padre vio a mi hijo leer mi Biblia, y le preguntó qué era”, dice Beniam, quien es ahora un seguidor de Cristo que vive en una zona densamente musulmana en la región del Cuerno de África. “Mi hijo le dijo que era mi Biblia, y mi padre se enojó mucho”.

Demissie, le dijo a Beniam que no permitiría que sus nietos fueran criados por un infiel, así que se llevó a sus nietos: Lamentablemente Beniam, no ha visto a ninguno de sus hijos en varios meses, sin embargo, él piensa todavía que todo el mundo debe tener una ejemplar de Biblia.

“Yo sé lo que es verdadero y una vez que sabes lo que es verdadero, no puedes volver atrás. [Mi esposa y yo] hemos decidido recorrer el camino de Jesús y nosotros no vamos a volver atrás, incluso si nuestra familia nos dice que renunciemos”, dice. “A pesar de que ha tomado a mis hijos, y aunque ha dicho que estoy muerto para ellos, todavía estoy diciéndole a la gente que se acerque a Jesús. Todavía ando obsequiando Biblias a aquellos que quieran leer”.

Beniam, dice que Jesús es el camino a la salvación y es muy diferente a los otros profetas. “Los caminos de los otros profetas son el camino del mundo y no llevan a ninguna parte. Sólo el camino de Jesús conduce a Dios”, dice. “Jesús nació del Espíritu de Dios, las cosas que hizo, nadie más las hizo, Él sanó a la gente y levantó muertos, en su amor, Él se acercó a las personas indignas para amarlos”, Beniam.

“Una noche, tuvimos un grupo de prostitutas en nuestra casa y la invitamos a ver una película sobre Jesús”, dice Beniam. “En un momento dado, Jesús extendió su mano durante uno de sus sermones y tocó a una prostituta”.

“Una de las mujeres prostitutas se levantó de un salto y comenzó a gritar. Ella dijo, ¿Cómo podía haberla tocado? ¿Cómo pudo este hombre santo haber tocado a esta mala mujer? Ella dijo que la historia no podía haber sido cierta, porque ningún hombre de Dios, jamás toca a una mujer así”, cuenta Beniam.

La mujer se fue abruptamente. Pero más tarde, Beniam y su esposa fueron capaces de compartir con ella que Jesús tocó a la mujer porque la amaba. “Cuando se dio cuenta de que Él era capaz de amar a esta mujer, ella dijo: “Yo voy a darle la espalda a mis pecados y no voy a prostituirme más”. Ella ahora está siguiendo el camino de Jesús”, dijo Beniam.

Muchas personas han creído en Jesús y ahora se reúnen en la casa de Beniam para recibir estudios bíblicos una vez a la semana por la noche. “Siempre que tenemos una pregunta, abrimos la Biblia y encontramos la respuesta”, dijo Beniam, quien extraña a sus hijos, pero ora por sus almas, para que busquen la verdad de Jesús.

Él continúa compartiendo el Evangelio con los demás. “Oren por nosotros que hemos recibido el amor de Dios, porque somos capaces de compartirlo con los demás”, dice Beniam.

* Nombres cambiados por motivos de seguridad que realizó Ava Thomas es un escritor / editor de la Junta de Misiones Internacionales con sede en Europa

Para aprovechar el tiempo hay que establecer prioridades


Cada persona es dueña de su tiempo y decide qué hacer con él en cada instante... si sabe organizarse.
Todos los días, cada uno de nosotros cuenta con la misma cantidad de tiempo: 24 horas. Lo que hace la diferencia es cómo lo utilizamos. Dominar el tiempo requiere atención, constancia, sentido de la responsabilidad, respeto a ti mismo, a los demás y orden. Todo esto no es nada fácil.

 
Las personas que aprovechan al máximo su tiempo posiblemente utilicen distintos sistemas y técnicas, pero tienen una cosa en común. Tienen una visión de cómo quieren utilizar su tiempo, es decir, tienen un sentido claro de las prioridades .Ellos saben qué es lo que quieren hacer con su tiempo.

 
Conseguir nuestras metas para un cambio efectivo probablemente nos exija un nivel de aprovechamiento del tiempo que no hemos alcanzado, ni necesitado antes.

 
La manera en que empleamos nuestro tiempo es una cuestión de hábitos. He aquí algunas estrategias básicas que, con algo de esfuerzo, pueden ayudar a cualquiera a organizar y aprovechar su tiempo.

 
En primer lugar, es importante crear un espacio propio . En segundo lugar, debe reconocer que sus obligaciones son tan importantes como las necesidades y requerimientos de los demás . En tercer lugar, aprenda a establecer límites en cuanto a que le interrumpan o alteren su horario laboral; por último, diseñe su horario personal.

 
LA AUTO OBSERVACIÓN
 
Para redimir el tiempo debemos intentar observarnos y estimar con precisión el tiempo que nos lleva cada una de nuestras actividades. A esta “auditoría” debemos sumarle el examen de nuestras prioridades.

 
A veces tendemos a hacer las tareas menos prioritarias en vez de hacer cosas más importantes . Podemos preguntarnos: “¿Cuál el mejor uso que puedo darle a mi tiempo?”, y de esa forma distribuir el mismo como resulte más provechoso.

 
“Cualquiera sea su prioridad –personal u otra, como aumentar las ventas, desarrollar un nuevo producto o completar un nuevo proyecto- , aprovechar el tiempo le puede ayudar a lograrlo”, dice Melissa Raffoni, fundadora de Skills Alliance.

 
Otro de los problemas habituales es la tendencia a estar demasiado disponible . Valdría la pena preguntarnos si estamos intentando contentar a todos para ser aceptado.

 
LO URGENTE Y LO IMPORTANTE
 
Si estamos siempre corriendo para completar tareas urgentes, probablemente significa que tenemos problemas para administrar nuestro tiempo, para identificar nuestras prioridades o acostumbramos a dejar cosas para luego .

 
Debemos aprender a delegar, o ignorar, las tareas que son urgentes pero no prioritarias. Por ejemplo, si un amigo necesita un libro suyo urgentemente, que venga él a buscarlo, o que se espere hasta mañana. Usted no puede dejarlo todo para llevárselo.

 
Mantener altos niveles de atención y concentración requiere a veces mucho esfuerzo, pero la concentración puede entrenarse mediante periodos breves e intensos de atención . Esta es una buena forma de ir adquiriendo destreza en hacerlo durante periodos más largos. Diez minutos de esfuerzo, con objetivos a corto plazo, pueden ser muy productivos.

 
Las distracciones tienen que ver también con nuestro nivel de ansiedad y tolerancia a la frustración. Si nos enfrentamos con una tarea difícil, que requiere de más tiempo, y pretendemos hacerlo todo de golpe, es probable que no lo consigamos. La consecución de objetivos ha de ser progresiva y marcándonos un ritmo para lograrlo.

 
A todos nos sucede: Postergamos nuestras responsabilidades de vez en cuando. La clave está en saber cuáles son las cosas “dejamos para luego”, cómo y por qué. Es importante descubrir qué tareas son las que más evitamos y cuál es nuestra excusa favorita para postergarlas . Tal vez nos refugiamos en la televisión, Internet o las labores domésticas. A veces posponemos cosas que son relativamente poco importantes, pero hay otras que posponemos por nuestra inseguridad acerca de cómo deberíamos hacerlas, porque son sumamente importantes o particularmente difíciles.

 
MIEDO AL FRACASO
 
Algunas personas temen fracasar debido a la importancia o dificultad de la tarea. Algunas temen al éxito, porque hacerlo bien implicaría nuevas y mayores exigencias. Otras resisten la autoridad y se resisten a cumplir sus demandas. Algunas personas son perfeccionistas y se niegan a intentarlo si no están seguros de un resultado perfecto. Algunos tienen muy baja tolerancia a la frustración y prefieren evitar el mal rato. Si el hábito de postergar nuestras tareas se convierte en un problema serio, deberíamos buscar la ayuda de un profesional.

 
Nuestras autocríticas o descalificaciones espontáneas aumentan el estrés. Este puede ser un factor que contribuya a disminuir la motivación y la acción, distraer la atención y concentración, reducir la eficacia y, finalmente, brindar una excusa para un mal resultado. Debemos analizar lo que nos decimos para ver si es algo que nos motiva o nos pone más ansiosos y proponernos reemplazar las críticas automáticas con acciones.

 
Otro factor que inhibe la acción es el perfeccionismo . Esta conducta refleja un pensamiento tipo todo-o-nada de forma que podemos estar evitando la acción por inseguridad o miedo. Algunas cosas son suficientemente importantes como para que las hagamos a la perfección, pero la mayoría se satisfacen con un esfuerzo “bastante bueno”.

 
¿APROVECHAR EL TIEMPO O MANEJARLO?
 
Según la experta Melissa Raffoni “aprovechar el tiempo es una estrategia que implica usar el tiempo de manera inteligente para conseguir metas más importantes”, mientras que “gestionar el tiempo es el proceso diario que usted usa para aprovechar el tiempo; es decir, las agendas, las listas de cosas por hacer, la delegación y otros sistemas que le ayuden a usar el tiempo eficientemente”.

 
Raffoni señala también que “sin la estrategia –la visión y el plan- la gestión del tiempo no necesariamente le ayudará a lograr sus metas. Por esa razón, el primer paso para aprovechar su tiempo es esclarecer cuáles sus prioridades"